Dejamos atrás a los protagonistas adolescentes por los
universitarios pero retomamos el número cinco. Un grupo de amigos constituido
por tres chicas y dos chicos deciden realizar una sesión de espiritismo
utilizando la tabla Ouija. El fin de este kamikaze plan es contactar con
Debbie, quien se suicidó pocos días antes sin que nadie pudiese ni siquiera
despedirse de ella. En una de las noches en la que los padres de la
fallecida estaban fuera de casa, los amigos acuden allí dispuestos a contactar
con ella. Ninguno cree que fuese capaz de terminar con su vida, están
dispuestos a descubrir la verdad a toda costa, pero no contactan con su amiga,
sino con otro espíritu que quiere ser liberado de su “condena”. Este ente
oscuro se servirá de los jóvenes para liberar su fuerza mientras va acabando
con cada uno de ellos.
De momento, y resulta un tanto triste decirlo, es la
película más “completa” que trata la temática del Tablero de Hasbro, pero de
una forma muy superficial. Hasta la fecha todos sabemos que es un tablero para
contactar con los muertos, sesiones de espiritismo gratuitas. Guarda poca
relación con la película de mismo título de 2004 que no merece la pena ver.
Pero ¿alguien sabe las pautas que hay que seguir a la hora de utilizar este “juego”?
Probablemente no interesa dar clases exprés de espiritismo mientras se le
induce el miedo al espectador.
Para
aquellos aficionados al cine de terror, no habrá sido una tarea muy complicada
encontrar similitudes con otras películas del mismo género. Aviso de que aquí
viene spoiler [Siguiendo el orden de “apariciones”,
la escena en casa de Debbie cuando están jugando a la ouija, uno de los
protagonistas mira a través de la lupa de la punta de flecha, ve a su derecha
al espíritu de una niña con la boca cosida que señala nerviosamente al fondo de
la estancia. De repente una mujer encolerizada vestida de negro y con un moño
repeinado se abalanza contra ellos. Aquí tenemos la primera película, Insidious Capítulos 1 y 2. Que a los
protagonistas en la posesión se les cosa la boca como al espíritu que los
posee, es una idea patrocinada por Exorcismo
en Georgia, aunque he de decir que no es la única idea que sacan de la
película. La posesión de una de las protagonistas, la que muere tras Debbie es
similar a la de Olivia en Posesión
Infernal. La historia de la familia que vivió anteriormente en la casa de
Debbie, (constituida por una madre y sus dos hijas) es similar a Exorcismo en Conecticut y El grito 2: madre que se dedica al
espiritismo usa a su hija como recipiente para que los espíritus puedan ponerse
en contacto con los vivos. Y para finalizar tenemos a la “preciosa” niña
maligna que debe de ser la hermana perdida de Samara, The ring] con esto finalizo el spoiler.
En lo referente a la anatomía de la película, sin ser más que
realista, quieren contar mucho en un tiempo limitado, demasiadas cosas en el
aire como de costumbre y todo muy superficial. Falta más información sobre el
tablero de Ouija y de como actúan los espíritus a través de ella, etc. Parece
que últimamente siempre introducen a un personaje (por lo general o africano o
de América del Sur) supersticioso que es experto en el tema del que trata la
película. En esta ocasión parece ser la niñera de una de nuestras protagonistas
y de su hermana y como podréis comprobar si la veis, aporta mucha información,
nótese la ironía.
Por otro
lado, todo pasa muy rápido, excesivamente. Te introducen en escenarios que no
tienen ningún sentido para tratar de llegar al tono. Los diálogos con falta de
fuerza y desde luego, eso de esconderse dentro de un armario en vez de atrancar
la puerta de la habitación ¿Enserio? ¿Desde cuando el armario es el sitio más
seguro del mundo? ¿Es algo así como con los vampiros, que si no les das permiso
a los espíritus no pueden atravesar el marco de la puerta? En su escasa defensa se podría decir que al
menos no ha recurrido al gore, algo que hay que agradecer. Retoma algunos
sustos de la vieja escuela que en un par de ocasiones le funcionan muy bien. Lo
más sorprendente es ver a Lin Shaye (Elis en Insidious), que en las dos únicas escenas en las que aparece, desde
luego que lo hace muy bien. Recomendable, pues para ver en casa porque para el
cine lo veo demasiado, es una de esas películas para pasar el rato, ya que no deja huella. El tema
espiritismo con tableros de Ouija puede dar mucho de sí, pero parece que
últimamente están faltos de inspiración.
Lo mejor: la
interpretación de Lin Shaye y los sustos de la vieja escuela que todavía
funcionan.
Lo peor: querer
contar tanto en un tiempo tan limitado en el que se recurren a escenas de otras
películas del género para contar una historia que no es innovadora.
Nota: 2,5 / 5
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